En un escenario productivo complejo para el maíz, sumado al desplome de los precios internacionales de los granos en Chicago, generan preocupación en una economía que necesita sumar dólares. Las primeras proyecciones en este sentido empiezan a preocupar, como el caso de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que calculó un ingreso de divisas para este ciclo por debajo de los U$S 30.000 millones.

En el apartado productivo, la BCR estimó una cosecha maicera de 50,5 millones de toneladas. A nivel global, hace 30 días se esperaba una producción total de granos cercana a las 138 millones de toneladas, pero este recorte en el maíz bajó esta cifra a 131,1 millones.

De este modo, se pasó de la segunda mejor campaña de granos de la historia a un ciclo por debajo de las mejores cifras para el sector.

“A este panorama de menor producción se le suma la caída en los precios internacionales de los principales productos de exportación del agro argentino, que desde principios de este año siguen un derrotero bajista y hacen mella en las proyecciones de exportación para el año que corre”, advirtieron los rosarinos.

Este dato no es menor y tomando como punto de partida los cinco principales complejos del agro -soja, maíz, trigo, girasol y cebada- la proyección de exportaciones para el 2024 perfora los US$ 30.000 millones y se ubica en US$ 29.300 millones.

Si bien esto implica una recuperación de U$ 5.700 millones con respecto al año pasado, el valor de lo exportado por estos productos quedaría US$ 1.700 millones por debajo del promedio de los últimos cinco años.

La bolsa hizo otro cálculo, en tomo las exportaciones por campaña comercial y añadió otros granos y derivados. Para la presente campaña 2023/24, la cuenta sumó US$ 30.700 millones, una caída de US$ 800 millones respecto a la última estimación de la bolsa.